domingo, 4 de marzo de 2012

La importancia de cantar

Mi hijo Héctor se pasa la vida cantando. Al numeroso repertorio que ha aprendido en casa (ya escuchó sus primeras canciones durante su vida prenatal) va incorporando las que canta en la guardería (¡qué ilusión me hace que sea él quien me enseñe canciones que yo no conocía!).

Ayer, cuando regresábamos a casa desde la escuela, Héctor empezó a entonar, espontáneamente, una canción nueva que tenía como centro de interés "los siete días de la semana". Ésta dice así (en catalán):

Dilluns, dimarts, dimecres i dijous
divendres, dissabte, diumenge, set dies són:
set dies són de la setmana,
cinc a l´escola i dos a casa.

que traducida (aunque creo que se entiende muy bien) quiere decir:

Lunes, martes, miércoles y jueves
viernes, sábado, domingo siete días son:
siete días son de la semana,
cinco en la escuela y dos en casa.

Este hecho cotidiano me hizo reflexionar sobre lo valiosas que son las canciones infantiles para la educación global de los niños;  la incorporación de éstas a la vida cotidiana de los más peques (tanto en la escuela como en casa) les aporta numerosos beneficios (tanto a nivel musical como extramusical) tal como ahora explicaré.

Como todos sabemos, una canción se compone de dos elementos fundamentales: la letra (que implica, a su vez, el ritmo) y la música (es decir, los sonidos que se suceden). 

Las letras de las canciones favorecen, en los niños,  el aprendizaje de diferentes cuestionesPor un lado,  éstas les ayudan a aprender, con total naturalidad, conceptos/elementos básicos de la vida como:
  • Los días de la semana (como en la canción que Héctor cantaba, la cual, además, aporta otras informaciones como que estos son siete, que la rutina semanal de un niño se organiza en cinco días en el "cole" y dos, en casa, y que, por tanto, 5 + 2= 7 )
  • Las letras
  • Los números
  • Los colores
  • Las cuatro estaciones
  • Las partes del cuerpo humano
  • Los animales
  • La naturaleza (árboles, flores, vientos, ríos, montañas...)...etc.
Éstas también les acercan a otras manifestaciones cotidianas de su entorno como las fiestas y tradiciones populares, los oficios o las leyendas (entre otras muchas).

Asímismo, gracias a la "naturaleza" de las canciones (letra que va "acompañada" de una entonación musical)  estimulamos en los niños el proceso de aprendizaje tanto del habla como de la lectura. En este sentido, Stefan Koelsch, doctor en neurociencia (además de músico y psicólogo) afirmaba en una Contra de La Vanguardia del pasado mes de agosto (que podéis leer íntegramente aquí), que "los niños a los que se les estimula el lenguaje musical aprenden más rápido los procesos del lenguaje, los matices, la sintaxis y la habilidad de escucha y tienen menos problemas de dislexia".

De hecho, mediante las canciones, no sólamente favoreceremos el habla y la lectura de la lengua materna, sino que también podemos acercar al niño, de manera muy natural,  a cualquier idioma extranjero cantándole (o poniéndole grabaciones) de melodías en otras lenguas. Cuando Héctor tenía un año, más o menos, compré un libro-CD de canciones populares en inglés; con el tiempo, las ha acabado aprendiendo de memoria y las repite perfectamente. Aunque, de momento, no conoce el significado de las palabras en ese idioma, poquito a poco se lo iré explicando y lo trataré de relacionar con los dibujos del libro que ilustran las letras de cada una de las canciones (de hecho, hay una sobre las partes del cuerpo humano que, mientras la cantamos, siempre voy señalando cada uno de los miembros de Héctor a los que hace referencia la letra para que él los relacione con su nombre en inglés-"Head, shoulders, knees and toes"; seguro que os suena-).

Por otro lado, las canciones son la base de la educación musical y, por tanto, deben tener un papel protagonista en las clases de iniciación a la música (tanto en la escuela ordinaria como en las escuelas de música y conservatorios).

Las canciones contienen todos los elementos del lenguaje musical (ritmo, melodía, armonía, forma, modo, tonalidad, compás, matices...etc, etc). Cuando un niños canta, se va empapando de todos ellos de manera espontánea, fácil y natural.
Posteriormente, estos conceptos se explicarán de manera teórica, así que, si el niño se ha musicalizado mediante el canto, éste los asimilará sin dificultades; por el contrario, si el niño ha cantado poco, probablemente presente problemas para entender los conceptos musicales teóricos, por un lado, y para realizar ritmos correctamente, entonar bien o concebir globalmente la forma de una obra (entre otros), por el otro.

Así pues, es importante entender que un niño que canta (y escucha cantar) muchísimo durante su más tierna infancia tendrá un bagaje musical sólido para afrontar con éxito la educación musical futura. 

Además de todos los beneficios mencionados hasta ahora, quisiera añadir que, mediante las canciones, los niños:
  • Aprenden a utilizar correctamente su propia voz, un instrumento único e intransferible que todos tenemos (y que constituye una de nuestras señas de identidad).
  • Estimulan su oído (y, por tanto, su cerebro) y su memoria.
  • Mejoran su expresividad: las canciones son un vehículo de expresión que permiten a los niños canalizar sus emociones y sentimientos. 
  • Son más felices. Como dice el dicho "quien canta, su mal espanta". Cantar es saludable emocionalmente; nos ayuda a sentirnos bien.

Sin duda, las canciones infantiles son pequeñas obras de arte, "patrimonio de la humanidad", que, a pesar de su sencillez formal, abren las puertas de la sensibilidad, la expresión y el conocimiento a quien las canta y las escucha.





27 comentarios:

  1. Qué buena entrada, Laura. Estoy totalmente de acuerdo contigo en todo. Nosotras las usamos con los peques a diario y les encanta. A veces nos sorprenden ellos a nosotras enseñándonos una nueva canción. Como el día que S. empezó "ser amigos, ser amigos, es mejor, es mejor, que andar peleando, que andar peleando, sin razón, sin razón", con la música de Frère Jacques. Me pareció adorable. También contamos, desde hace unos meses, con una especialista en musicoterapia y los resultados están siendo sorprendentes. Un beso.

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    1. ¡Qué interesante lo que comentas! Estoy segura de que la música será muy valiosa para vuestros peques. Yo hace tiempo que tengo ganas de estudiar musicoterapia...¡algún día será!
      ¡Un abrazo fuerte!

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  2. Como siempre, me encantan tus entradas, una información muy valiosa.
    Un besote

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    1. Gracias, Lila. Me alegro de que te gusten las entradas!
      Un abrazo fuerte!

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  3. Que interesante entrada Laura, ademas se te echaba de menos.
    Son muy importantes las cosas que nos cuentas. Los meses que mi hijo fue al colegio aprendió en canciones los días de la semana, los meses del año y las cuatro estaciones. Todo esto en francés, idioma que no conoce.
    Aunque el realmente no sabia lo que estaba cantando, pero si que le servia para practicar con la pronunciación. Y ademas le gustaba porque luego en casa se pasaba la tarde cantándolas.
    Saludos

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    1. Gracias, Maribel. La verdad es que tengo poquito tiempo para publicar...; en cualquier caso, ¡gracias por tu interés en el blog!
      Un abrazo fuerte

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  4. Hola Laura
    Trabajar con el folklore con los niños, hasta los 8-9 años es muy interesante. Seguro que lo haces y has comprobado su eficacia. Tienes un blog estupendo!!
    Un abrazo

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    1. ¡Bienvenida, Isabel! Sí, la música popular (o folklórica) debe ser como la "lengua materna" de cualquier niño; es la base musical de cualquier individuo.
      Tu blog también me ha parecido muy interesante y muy útil...¡allí me verás!
      Un abrazo

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  5. Laura, qué casualidad. Estaba leyendo y refrendando este artículo y al entrar a tu blog, me encuentro ¡con el mismo tema! Bueno, totalmente de acuerdo. Te lo paso porque está enfocado desde otro punto de vista y así se complementa y TE DA TODA LA RAZÓN.

    Un abrazo.:)

    ¿Quién no ha oído el refrán 'Quién canta sus males espanta'? Cantar no sólo es una buena herramienta para ayudarnos a enfrentar con buen humor las adversidades, como también un buen alimento para el cerebro de los niños, según los hallazgos médicos del Ministerio del Departamento de salud pública, de Alemania.

    En el estudio, que contó con la participación de 500 niños del curso infantil, se observó que un 88 por ciento de los niños que cantaban con frecuencia, estaban preparados para la escolarización normal, en comparación con sólo el 44 por ciento de los niños que cantaban menos a menudo. De este modo, el estudio concluye que los niños necesitan, desde sus primeros años de vida, de más estímulos musicales. Cuánto más cantan en sus juegos, más nutridos estarán sus cerebros.

    Cantar estimula el cerebro de los niños

    Cantar funciona como una potente vitamina en el cerebro de los niños. Al jugar cantando los niños consiguen centrarse más en si mismos y en el momento en que están viviendo. El canto les ayuda a sentir la intensidad de sus actividades. Además, permite transformar cualquier momento de estrés, de tensión o de ansiedad, en un instante más sereno, tranquilo y relajado.

    La música relaja. Tal vez por eso los niños consigan una mejor concentración en los estudios. El estudio demuestra que jugar cantando apoya el desarrollo de los niños en todas las áreas, sean física, mental y social, en una medida que se ha subestimado. Cantar les ayuda a desarrollar el habla más adecuadamente, les permite mejorar su conducta social y su comportamiento frente a la agresividad, ya que al cantar se les reducen las hormonas que desencadenan la agresión. Cantar también hace que los niños produzcan mayor cantidad de hormonas que desencadenan el sentirse bien. Ya decía yo que cantar era bueno. Otra cosa es cantar bien, claro.

    Vilma Medina. Directora de GuiaInfantil.com

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    1. Muchas gracias por tu aportación, Mariaje...¡qué casualidad!. Me guardo este texto porque me ha aportado nuevos datos que me parecen muy interesantes.
      Un abrazo!!

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  6. Intuitivamente una sabe que ver a su hijo cantando es bueno, pero no lo había analizado tan en profundidad como tú, así que me encanta comprobar que lo que hacemos por diversión es además tan educativo! Un besote!

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    1. Es verdad, Mo, que todos los padres cantan a sus hijos intuitivamente...;es como si su instinto les dijera que cantar va a beneficiar a sus niños (lo cual, así es...).
      Un abrazo y gracias por el comentario.

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  7. A mi peque desde bien pequeño le gusta mucho las canciones infantiles, así que casi siempre le canto y el ya baila y toca sus palmitas conmigo, cantar aún no sabe pero cuando aprenda estoy segura que no parará jeje. Gracias por la información...siempre aprendo un poquito contigo y me alegro de que estes de nuevo por aquí. Besitos!

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    1. Gracias a tí, Yasmín, por tu comentario. Yo aprendo también muchísimo con tu blog.
      Un abrazo

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  8. Magnífico tu blog, Laura. Me encanta leerte. A mi peque le ponía música en la incubadora y luego cuando la tenía en brazos con el "método canguro" escuchábamos música juntas y su estado mejoraba mucho. Luego hemos seguido escuchando música juntas y con el segundo niño, lo mismo.

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    1. Hay muchos estudios sobre cómo la música ayuda a los niños prematuros a madurar antes y mejor, a reducirles el estrés que les provoca estar en un incubadora...;en definitiva, a ayudarles a "ir hacia adelante". Me alegro de que tú lo pusieras en práctica con tu hijo (el método canguro también es fantástico).
      Gracias por tu comentario.
      Un abrazo fuerte

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  9. Cantar, me parece fundamental. Desde muy pequeños es un placer escucharles cantar y es verdad que nos enseñan bastante.
    Yo con mi hija hago actividades cantando, ya iré haciendo algunas entradas al respecto.

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    1. Gracias por el comentario, Jirafa. Me gustará mucho leer tus entradas sobre música...¡siempre me aportas ideas!.
      Un abrazo

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  10. "Los pueblos que cantan, viven". Gracias por tu entrada.

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    1. No conocía este dicho, Agustín, pero no puedo estar más "de acuerdo".
      Un abrazo y gracias a tí por pasarte por el blog.

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  11. Una entrada muy buena Laura! aqui en casa somos bastante cantarines, sobre todo mis peques y yo, mi maridin es mas sosito pa estas cosas jajaja!

    pero fijate lo que son las cosas que ayer mi chica (que tiene 3 añitos) me estaban cantando en casa esta misma cancion que has puesto tu aqui pero en valenciano, pero vamos que como yo digo valenciano y catalan primos hermanos, y es que a ella le encanta cantar!

    un besito guapa y aqui estoy devolviendote tu visita y si tu me lo permites por aqui me quedo

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    1. Hola Gema! bienvenida al blog! (y felicidades por el tuyo). Así que nuestros hijos cantan "a distancia" la misma canción...¡qué bueno!!!! por lo que veo, tienen la misma edad.
      Un abrazo!

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  12. maginífica entrada!! Te lo has currado!!!! jejeje
    Un besito

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    1. Gracias, Marta! Se hace lo que se puede..(je,je).
      Un abrazo!

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  13. Hola!!! Aquí ando conociéndote... A mí me gusta mucho cantar. Todos los días canto alguna cosa que escucho en la radio o, al menos, un anuncio de la tele, jajaja. Ahora que lo pienso, mi mamá siempre ha sido muy cantarina también, y siempre está escuchando música, así que debes de llevar razón en eso de que se te pega el gusto por la música si lo vives desde pequeño. Un besito.

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    1. Bienvenida al blog! (el tuyo me gustó mucho...¡es muy divertido!) y gracias por tu comentario!
      Un abrazo!

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  14. Si, Laura, efectivamente, cantar estructura el cerebro y facilita mucho la memorización (no me explayo). Sólo quería decir que, como profesora de inglés para niños, te doy la razón: noto que, a los 4 años, lo mejor es cantarlos, bailar y poner música para facilitar el aprendizaje a todos los níveles. Me di cuenta que más hablaba, menos escuchaban pero más canto ¡mejor repiten!
    Os recomiendo un libro de Oliver Sacks, "Musicofilia", sobre cerebro y música.

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